Sonia Olschanezky (nacida el 25 de diciembre de 1923 en Chemnitz; fallecida el 6 de julio de 1944 en el campo de concentración de Natzweiler-Struthof) fue una agente de la inteligencia británica Special Operations Executive (SOE).
El padre de Sonia Olschanezky, Eli Olschanezky, procedente de Odesa, había conocido a su esposa alemana Helen mientras estudiaba ingeniería química en Leipzig y se casó con ella en 1916.
En Chemnitz, donde nacieron dos hijos y la hija Sonia, trabajó como vendedor en una fábrica de medias.
A mediados de los años 20, fue puesto al frente de la fábrica de Bucarest. Tras las disputas financieras con los socios rumanos, la familia se trasladó a París en 1930, donde Sonia Olschanezky asistió a un liceo y recibió formación de ballet para seguir una carrera escénica.
Tras la ocupación alemana de Francia en el verano de 1940, ya no recibió un compromiso por ser judía, por lo que tuvo que trabajar como empleada doméstica. A través de su empleador conoció al empresario suizo Jacques Weil, que trabajaba para la Resistencia, y se unió a él.
En junio de 1942, Sonia Olschanezky fue detenida por primera vez cuando, por orden de Alemania y en colaboración con el gobierno de Pétain en Vichy, comenzaron las detenciones y deportaciones de judíos franceses.
Fue encarcelada en el campo de tránsito de Drancy hasta que su madre consiguió que la liberaran. Con la ayuda de unos amigos judíos que confeccionaban abrigos para la Wehrmacht alemana en su fábrica de pieles, obtuvo documentos falsos que identificaban a su hija como trabajadora de “valor económico de guerra” en la fábrica de pieles.
En 1943, Sonia Olschanezky, bajo el nombre encubierto de “Tanja”, se unió a la red de agentes del SOE “Juglar” (en Francia también “Robin”) con Weil, que realizaba operaciones de sabotaje en la zona de Chalons-sur-Marne. “
Juglar” era una rama de la red de agentes del SOE “Médico”, dirigida por Francis Suttill, de nombre en clave “Prosper”.
Con papeles falsos a nombre de “Suzanne Ouvrard”, Olschanezky prestó servicios de mensajería a los agentes del SOE y a la Résistance.
Aunque en el verano de 1943, como consecuencia de la traición, la mayoría de los miembros del anillo “Médico” cayeron en manos de los alemanes, Olschanezky siguió sin ser descubierto durante otros seis meses.
El 21 de enero de 1944, fue detenida durante una reunión en París con un supuesto agente del SOE, que en realidad era un miembro del Servicio de Seguridad alemán (SD).
Tras numerosos interrogatorios y malos tratos en el cuartel general del SD en la avenida Foch, fue encarcelada en la prisión de Fresnes, en París. El 12 de mayo de 1944, un camión llevó a Sonia Olschanezky y a otros siete agentes del SOE detenidos en Fresnes, Yolande Beekman, Andrée Borrel, Madeleine Damerment, Vera Leigh, Eliane Plewman, Diana Rowden y Odette Sansom, a la prisión de Karlsruhe, donde fueron recluidos en régimen de aislamiento como los llamados “prisioneros de protección”.
El 6 de julio, Sonia Olschanezky, Andrée Borrel, Vera Leigh y Diana Rowden fueron deportadas al campo de concentración de Natzweiler-Struthof, en Alsacia. Esa misma noche, cada uno recibió una inyección letal de fenol. Sus cuerpos fueron incinerados.
Una placa en el memorial del campo de concentración de Natzweiler-Struthof conmemora el asesinato de Sonia Olschanezky y sus tres compañeros.