Franco Bordoni Bisleri nació en Milán el 10 de enero de 1913 en el seno de una familia acomodada: su abuelo era un empresario que había creado un licor digestivo muy conocido en la época, el Ferro-China Bisleri. La marca del amargado era un león rampante con la inscripción “Robur”, que se convirtió en su apodo, pintado en la mayoría de los aviones que pilotaba.
Tras asistir al prestigioso colegio de San Carlo, Franco comenzó a dedicarse a la velocidad, ganando notoriedad como piloto de carreras. Intentó alistarse en el ejército del aire, pero fue rechazado en el reconocimiento médico debido a una desviación de su tabique nasal. Perseverante y con buena posición económica, obtuvo su licencia de piloto civil con la que pudo alistarse en 1937 como teniente piloto complementario.
Tras cumplir el servicio militar, volvió a la vida civil pero, al estallar la guerra, pidió ser llamado a filas y fue destinado al 95º Escuadrón del 18º Grupo del Tercer Ala. Con su CR 42, fue adscrito al Cuerpo Aéreo Italiano en Bélgica para participar en la Batalla de Inglaterra, batalla en la que se comparó lo mejor de la tecnología aeronáutica de la época y los aviones italianos no estuvieron a la altura.
De regreso a Italia en enero de 1941, el 18º Grupo fue desplegado en el norte de África, donde podía enfrentarse a los adversarios que tenía a su alcance.
El 10 de marzo de 1941, consiguió su primera victoria al derribar un Bristol Blenheim británico tras una persecución de 100 kilómetros. Como suele ocurrir con los aviadores italianos, las fuentes son bastante confusas: según algunas, la victoria se logró en colaboración con el mariscal Felice Longhi, mientras que según otros autores puede atribuirse al suboficial en solitario.
De nuevo a bordo de un CR 42, derribó un Hawker Hurricane el 14 de abril y otro Blenheim el 17 del mismo mes.
El 2 de junio de 1941, Bordoni derribó dos Bristol Blenheims frente a Bengasi y fue ascendido a teniente. El primer ciclo africano del piloto llegó a su fin cuando el 18º Grupo fue enviado de vuelta a Italia para ser equipado con los más modernos monoplanos MC 200.
Después de la Segunda Guerra Mundial declaró: “En 1941 el C.R.42 era un buen avión, fácil de volar, robusto y maniobrable, pero le faltaba velocidad y armamento. Podía luchar contra los Gladiadores, los Blenheims y los Wellingtons, pero contra otros aviones, estaba completamente superado”.
A continuación, el 18º Grupo fue desplegado en Grecia, donde no tuvo oportunidad de medirse con la aviación enemiga; en julio de 1942, todo el 3º Ala fue trasladado al norte de África para participar en las operaciones ofensivas del Eje. Al Grupo se le asignaron principalmente tareas de ataque a tierra.
A principios de octubre del mismo año, el ala comenzó a recibir los primeros Macchi MC 202, aviones capaces de competir en igualdad de condiciones con la pariclasse aliada; al mismo tiempo, los Bordoni Bisleri empezaron a conseguir de nuevo victorias. Entre el 20 de octubre y el 7 de noviembre, derribó siete aviones enemigos, seis Curtiss P-40 y un Douglas Boston.
El 30 de octubre, al regresar de un vuelo de reconocimiento, Bisleri derribó otro P-40 y el 1 de noviembre, con el teniente Roberto Caetani, se enfrentó a 15 P-40; en el encuentro Bisleri derribó dos cazas enemigos y su copiloto un tercero. Los dos pilotos fueron condecorados con la medalla de plata al valor militar, para Bisleri era su tercera condecoración.
El 4 de noviembre, Bordoni Bisleri en el transcurso de un feroz combate aéreo consiguió derribar otro caza Curtiss, para el piloto italiano fue la última victoria en África ya que el día 19 resultó herido en un accidente de tráfico y por ello fue enviado de vuelta a casa en un barco hospital.
Tras recuperarse, volvió a volar, esta vez a bordo del ultramoderno Macchi MC 205, comprometido con el 3er Ala en la defensa de Roma. Del 30 de julio al 5 de septiembre de 1943, al piloto italiano se le atribuyen otras siete victorias: seis cuatrimotores B-17 y un B-26.
El armisticio del 8 de septiembre puso fin a la carrera bélica del teniente Franco Bordoni Bisleri, que terminó con 19 muertes, 3 medallas de plata y la Cruz de Hierro de segunda clase.
Después de la guerra, Bisleri se hizo cargo del negocio familiar y volvió al automovilismo, convirtiéndose en uno de los pilotos aficionados más populares de Europa. Murió en un accidente aéreo el 15 de septiembre de 1975, cuando el avión que pilotaba se estrelló mientras volaba de Roma a Milán. Todos los ocupantes del avión murieron en el accidente: Bisleri, su hijo de 10 años y su amigo Gianni Allegri. Los medios de comunicación de la época prestaron gran atención al accidente, sin mencionar el pasado de Bisleri como piloto de caza.