Tabla de contenidos [ mostrar ocultar]
- Cabeza de puente enemiga en las afueras de Moscú
- Gran operación estratégica
- Errores en las tropas soviéticas
- Liberación de Rzhev
- Planificación de la Operación Marte
- Ofensiva que se convierte en una nueva tragedia
- La Operación Búfalo toma el relevo
- Liberación de la ciudad de Rzhev
- Victoria costosa en la batalla de Rzhev
- Ciudad muerta
- El resultado de la batalla
Aunque han pasado más de siete décadas desde la época de la Gran Guerra Patria, la batalla de Rzhev sigue atrayendo la atención de los investigadores profesionales y de quienes desean preservar la memoria de los años pasados. Muchos materiales relacionados con ella no se han puesto a disposición del público en general hasta estos últimos años y han permitido conocer mejor los acontecimientos que tuvieron lugar.
Cabeza de puente enemiga en las afueras de Moscú
Según los materiales sobre la historia de la Gran Guerra Patria, la ofensiva de las tropas soviéticas en el Frente Occidental en 1941-1942 condujo a la formación del llamado saliente Rzhev-Vyazemskiy.
Este término se entiende comúnmente como el territorio ocupado por los alemanes, que mide 200 km a lo largo del frente y desciende hasta una profundidad de casi 160 km. Debido a su ventajosa posición estratégica, fue considerada por el mando alemán como la base más conveniente para la ofensiva general contra Moscú.
Para ello, los fascistas concentraron en la proyección Rzhev-Vyazemsk 2/3 de todas las fuerzas del ejército alemán “Centro”. En esta situación, la batalla de Rzhev en 1942-1943, que se prolongó con insignificantes interrupciones durante 13 meses, fue la operación de combate a gran escala gracias a la cual no se pudieron realizar los planes del enemigo. Fue llevado a cabo por las fuerzas de Kalinin y los frentes occidentales.
Gran operación estratégica
El término adoptado en la actualidad es el de Batalla de Rzhev, incluye una serie de operaciones ofensivas separadas, cuyo objetivo era alejar a los alemanes de Moscú en la medida de lo posible y, tras despejarlos del territorio de la protuberancia Rzhev-Vyazemskoy, privarlos de una ventaja estratégica.
En cumplimiento de su tarea, en los primeros meses de la operación las tropas soviéticas liberaron del enemigo Mozhaisk, Kirov, Lyudinovo, Vereya, Medyn y Sukhinichi, lo que les permitió, mediante el desarrollo de la ofensiva, desmembrar las fuerzas alemanas en varios grupos separados y luego destruirlas.
Errores en las tropas soviéticas
Sin embargo, este desarrollo favorable de los acontecimientos fue impedido por la inesperada decisión de Iósif Stalin de transferir una parte importante del 1er Ejército de Asalto comandado por Kuznetsov y transferir casi todo el 16º Ejército de Rokossovsky en otras direcciones. Las unidades restantes, inconmensurablemente debilitadas por una redistribución tan inoportuna de las fuerzas principales, no pudieron completar la operación iniciada, como resultado de lo cual la iniciativa pasó al enemigo, y la batalla de Rzhevskaya fue sofocada.
Tratando de corregir la situación, en los últimos días de enero de 1942, Stalin ordenó el envío de considerables refuerzos bajo Rzhev, y el 33º Ejército del teniente general M.G. fue trasladado urgentemente allí. Sin embargo, en lugar de la prevista ruptura de las defensas enemigas, esta agrupación de tropas fue rodeada, a consecuencia de lo cual fue destruida, y su comandante, antiguo héroe de la Guerra Civil, se suicidó.
Esta operación fallida dio lugar a una verdadera tragedia que supuso enormes pérdidas para el ejército soviético. Según datos oficiales, hubo unos 273 mil muertos, desaparecidos o capturados en cautiverio, y sólo algo más de ochocientos soldados del destruido ejército de Efraín lograron escapar del anillo enemigo.
Liberación de Rzhev
Sin embargo, a pesar del trágico fracaso, la batalla de Rzhevskaya continuó. A principios de junio de 1942, el Mando Supremo estableció la tarea de liberar de los alemanes, y especialmente de los Rzhev, una serie de ciudades clave en la región de Kalinin. En su ejecución participaron fuerzas de ambos bandos. Como antes, fue el Oeste, comandado por G.K. Zhukov y Kalininsky – I.S. Konev.
El ataque a Rzhev comenzó el 30 de julio y el primer ataque de los frentes unidos fue tan potente que pronto las tropas se acercaron a la ciudad a una distancia de 6 km. Parecía que el objetivo se había logrado y que la batalla de Rzhev, cuya importancia era tan grande, estaba cerca de una conclusión victoriosa. Pero mientras tanto, superar esta última línea de defensa del enemigo llevó casi un mes y costó la vida de varios miles de soldados.
Cuando finalmente, a finales de agosto, las unidades avanzadas de las tropas soviéticas entraron en la ciudad, el departamento político del frente decidió invitar a los representantes oficiales del presidente estadounidense Roosevelt, que se encontraban en el país en ese momento, para que se lucieran ante ellos con la victoria que había supuesto la batalla de Rzhev. Sin embargo, resultó que el triunfo fue prematuro. Al cabo de unos días, con la llegada de refuerzos, los alemanes recuperaron sus posiciones anteriores.
Planificación de la Operación Marte
Habiendo cambiado de táctica, el mando soviético encomendó a las fuerzas del frente unificado la tarea de superar la línea de defensa del grupo “Centro”, creando así las condiciones previas para la eliminación de todas las fuerzas enemigas reunidas en el abismo Rzhev-Vyazemskiy. Se eligió la zona de menor concentración de fuerzas enemigas como lugar de un ataque decisivo. Estaba situada entre los ríos Osuga y Gzhat. Todavía no se ha emprendido la ofensiva sobre ella. La operación se denominó “Marte”.
La ofensiva planeada perseguía otro objetivo importante: con su ayuda, el alto mando pretendía desviar importantes fuerzas alemanas de Stalingrado, donde la batalla estaba entrando en su fase decisiva. Para ello, en el orden de la desinformación, los alemanes recibieron información en la que se sobrestimaba considerablemente el número de tropas soviéticas enviadas para romper la defensa del grupo “Centro”.
Ofensiva que se convierte en una nueva tragedia
En esta etapa, la batalla de Rzhev, cuya pérdida ya ha superado los 300 mil. hombres, comenzó, como antes, con un éxito temporal. Las fuerzas del 39º Ejército, con un relámpago, desprendieron al enemigo de la aldea de Young Tud y, continuando la ofensiva, liberaron la región de Tula de los enemigos.
Al mismo tiempo, el 1er Cuerpo Mecanizado asestó un golpe tangible al enemigo cerca de la ciudad de Bely. Pero pronto este intento de invertir el rumbo en el curso de la batalla se convirtió en pérdidas y derramamiento de sangre incalculables para nuestros soldados.
Tras detener la ofensiva de las tropas soviéticas con un poderoso e inesperado contraataque, los fascistas destruyeron el 20º ejército y rodearon a dos cuerpos: el 6º de tanques y el 2º de Caballería de la Guardia. Su destino fue igualmente trágico. G.K. Zhukov intentó salvar la situación. Insistió en continuar la ofensiva, pero a pesar de todos sus esfuerzos, incluso los nuevos intentos de romper las defensas del enemigo se sofocaron.
En diciembre, el resultado de la batalla de Rzhev fue desastroso. Según datos oficiales, la fallida operación “Marte” costó la vida a 100 mil soldados soviéticos. Muchos investigadores creen que estos datos son muy incompletos. El acercamiento al final de 1942 no trajo una victoria tan esperada bajo el mando de Rzhev.
La Operación Búfalo toma el relevo
Analizando la situación actual, el mando alemán comprendió que el abultamiento Rzhevsk-Vyazemsky formado durante las batallas anteriores era su lugar más vulnerable, y que tarde o temprano las tropas en su territorio serían rodeadas. En este sentido, el coronel general Kurt Zeitzler, que comandaba este grupo de fuerzas, se dirigió a Hitler con la petición de que permitiera desviar las unidades que se le habían encomendado a una nueva línea de defensa que atravesaba la ciudad de Dorogobuzh.
Tras recibir la orden en cuestión de Berlín, los alemanes comenzaron a aplicarla. Esta operación de retirada a gran escala recibió el nombre en clave de “Wuffel”, que significa “Búfalo”. Su oponente pudo llevar a cabo prácticamente sin pérdidas, lo que, según los historiadores militares, fue el resultado de acciones bien diseñadas y planificadas.
Liberación de la ciudad de Rzhev
A finales de marzo de 1943, los alemanes habían abandonado todo el abismo Rzhev-Vyazemsky, cuyas batallas continuaron durante todo el año. Tras su marcha, dejaron las ciudades de Vyazma, Gzhatsk, Olenino y Bely completamente quemadas y destruidas.
Buscando a un enemigo en retirada, las tropas soviéticas avanzaron, y el 3 de marzo de 1943 el Trigésimo Ejército, completamente renovado tras sus anteriores pérdidas, se unió a Rzhev. La ciudad estaba casi vacía, sólo la retaguardia del 9º Ejército de la Wehrmacht, que se había retirado en ese momento, permanecía en su posición, creando la ilusión de la presencia alemana.
Habiendo dejado atrás Rzhev, las tropas soviéticas continuaron desarrollando la ofensiva, y se vieron obligadas a detenerse sólo para llegar a la ciudad de Dorogobuzh, donde el enemigo había creado una poderosa línea de defensa. Se hizo evidente que no era posible avanzar más en esta etapa y las batallas adquirieron un carácter posicional. Sólo en el verano de 1943, tras la finalización con éxito de la operación cerca de Kursk, lograron expulsar al enemigo de la línea que ocupaban.
Victoria costosa en la batalla de Rzhev
Según los historiadores, los acontecimientos que tuvieron lugar en 1942-1943 en el saliente Rzhev-Vyazemskiy son uno de los episodios más sangrientos de la Gran Guerra Patria. No es de extrañar que el pueblo recibiera el nombre de “picadora de carne Rzhevskoy” y “Prorva”.
La verdad sobre la batalla de Rzhev y las pérdidas que fueron el resultado de las decisiones precipitadas y apresuradas del mando y de Stalin personalmente, se ocultó durante muchos años. Y fue realmente aterrador.
Las pérdidas irrecuperables de las tropas soviéticas, que incluyen los muertos, los desaparecidos, los tomados como prisioneros y los que murieron por las heridas en los hospitales, ascendieron a 605.000, según las estimaciones más modestas. Y esta sangrienta estadística muestra sólo una imagen de las batallas de 1942-1943 en el saliente Rzhev-Vyazemskiy.
Ciudad muerta
La ciudad de Rzhev, que había estado en el centro de las hostilidades durante 13 meses, cuando los alemanes finalmente la abandonaron, fue completamente destruida tanto por las balas alemanas como por los ataques de la artillería y la aviación soviética que se infligieron en sus intentos de liberación. De los 5.442 edificios residenciales, sólo 298 permanecían relativamente intactos.
Las bajas entre la población civil fueron enormes. Se estableció que de los 20.000 habitantes ocupados de la ciudad, sólo 150 seguían vivos en marzo de 1943. Todos estos datos nos permiten imaginar lo costosa que fue la batalla de Rzhevskaya, cuyos acontecimientos nunca desaparecerán de la memoria de la gente.
El resultado de la batalla
Sin embargo, no hay que perder de vista la gran importancia que tuvo la batalla de Rzhevskaya durante la guerra. Gracias a las persistentes acciones ofensivas de las tropas soviéticas, los alemanes se vieron obligados a retirarse, lo que les permitió alejarse más de 160 km de la Línea de Moscú por delante.
Además, la batalla cerca de Rzhev atrajo considerables fuerzas enemigas y contribuyó al éxito de la batalla de Stalingrado. También es imposible pasar por alto el factor moral, ya que la noticia de la liberación de Rzhev tuvo un efecto beneficioso en el espíritu de lucha de todo el ejército soviético.