Contemporáneo del Renault R35 y del Hotchkiss H35, el FMC 36 fue juzgado por los militares como el mejor de los tres, especialmente por su potencial para muchos desarrollos posteriores.
El problema era el precio desorbitado: se hizo un pedido inicial para la producción de 100 unidades a un coste de 450.000 francos cada una, un precio muy superior al de sus dos rivales
El tanque número 100 se entregó el 13 de marzo de 1939 y cuando las autoridades estaban considerando un segundo pedido de producción, FCM decidió duplicar el precio de la unidad y el pedido se canceló.
En comparación con muchos tanques contemporáneos, el FCM tenía algunas características innovadoras, en particular el casco de chapa soldada y muy inclinada, el motor diesel y el diseño hermético que protegía a la tripulación de un ataque con gas.
En el momento del armisticio, 50 de ellos fueron capturados por los alemanes, que los olvidaron en un almacén hasta 1943, cuando algunos fueron convertidos en destructores de tanques Marder I.